Habitación de Alice y Jasper

Me mordi el labio inferior.
-Lo cierto es que sí-murmure levantandome poco a poco continuaba desnuda.
-¿sabes que cuando la familia se entere de esto me confinara en una habitacion para analizarme y ver soluciones?-pregunte con ironia-¿porque no pasas mi primera noche humana conmigo?-le pregunté sabia que a el le preocupaba su autocontrol.
-Una cena...-sonrei y mi estomago rugio.

-Es lo que planeaba- le dije sonriendole mientras me ponia de pie -Te llevare a Bella Italia...Edward dijo que era un buen lugar, aunque no haya comido nada- sonrei y agrege -saldre un momento para que te vistas...te espero afuero- sali de la habitación dandole un beso en la mejilla y sali por la puerta.

Apoye mi cabeza sobre el muro cuando sali...me estaba empezando a molestar el olor a su sangre, era verdaderamente delicioso, aunque sabia que no me resultaba tan fuerte como a James, el cazador, pero aun asi me tentaba.

Me golpee en la cabeza como tratando de hacerme reaccionar...yo seria el ultimo ser en la tierra que pudiera lastimar a Alice...la amaba demasiado para tomar su sangre, sin saber si perderia el control, pero estaba seguro de algo...algo que Edward y Bella me habian mostrado; El amor era mas fuerte que la sed...y en ese momento, mientras la esperaba, tuve plena confianza de ello.

Spoiler:

No me puse muy destapada porque tenia frio y que con este cuerpo muchas de las cosas de mi armario quedarian encerradas en el olvido,baje hacia abajo con discreción me acerque a él,estaba tan guapo.
-Buenas noches...-le volvi a saludar avergonzada mientras sabia que un sonrojo acudiria a mi rostro.

La voltee a ver...ella seguia siendo tan increiblemente hermosa aun cuando era humana -Buenas noches, señorita Withlock- dije haciendole una reverencia pronunciada -Permitame llevarla a su coche- tendi el brazo para que ella se apoyara sobre el, mientras le mostraba una calida sonrisa.

-Jasper no tienes porque hacer esto si no quieres esto es dificil para ti,se que no me haras daño pondria la mano en el fuego por ese hecho pero... se que tu estaras incomodo-le sonrei y acarisie su mejilla-volvamos a casa...-me di la vuelta para caminar de nuevo hasta el porsche de la mansión.

Rapidamente apareci detras de ella y deposite un beso sobre su cuello -No te preocupes...estoy bien, recuerda que acabamos de ir de caza- lo deje hasta ahi porque no queria agregar lo que habia sucedido despues.

Tome a Alice por sorpresa mientras la cargaba en mis brazos, comenze a correr en dirección a la cochera mientras tomaba de su bolso las llaves de su Porsche amarillo.

La introduje en su coche en el asiento del copiloto mientras yo entraba del lado del conductor, lo encendi y comenzamos a salir de la cochera.

Cuando Jasper beso mi cuello un suspiro escapo de mis labios.
Es un vampiro y ese acto me habia puesto los pelos de punta aunque solo fue un momento,me quede totalmente atonita cuando salio corriendo a velocidad vampirica el viento azoto mi cara,me agarre fuerte a su cuerpo,ya que tenia miedo de caerme me deposito en el porsche y me mire en el espejo,todo el pelo alborotado.
Sople para que al menos el fleco volviera a su sitio me lo coloque con las manos el corazón lo tenia a mil por hora.
-¿Al menos podrias avisar cuando decidas jugar a los juegos olimpico de atletismo?-pregunté de forma irónica y le sonrei,queria conducir pero le dejaria esa parte a él.
Abri la ventana que se encontraba en mi puerta correspondiente del automovil,nunca habia sentido esa brisita que azotaba mi cara.

-Lo siento- me disculpe sonriendole -Se me ha olvidado, no volvera a suceder- que bueno que se me habia olvidado que era humano cuando estaba corriendo y no en otrs situación.

El sonido del desbocado corazón de Alice me hipnotizaba...era un sonido encantador y cuanto mas lo escuchaba sentia que mas me dejaba llevar a su ritmo.

Vi que con el viento de la corrida y la del coche el cabello de Alice saltaba por todas partes, era todo un espectaculo de belleza, cada parpadeo y cada suspiro era hermoso, no pude contenerme y acaricie suavemente su cabello, mientras nos dirigiamos a Bella Italia.